Hace ya casi tres años decidí escribir mi primera novela.
Desde que era niño me gustó leer, gusto compartido prácticamente por todos mis hermanos y hermanas gracias a mis papás. El gusto por la escritura vino también cuando era niño y participé en los concursos de cuentos que se suelen organizar en el colegio, pero después lo olvidé por muchos años.
Entonces, en el 2021 y en medio de los cambios provocados por el Covid-19, mi suegro me pidió ayuda para publicar un libro que llevaba escribiendo desde hacía cuarenta años, y al que solo podía dedicar el poco tiempo libre que le dejaba su profesión de ingeniero.
La intención era autopublicar pero yo, aunque buen cliente de Amazon para comprar, no tenía ni idea del proceso de cómo se convertía un libro en Word en un manuscrito listo para venta bajo demanda.
Afortunadamente fueron muchas las personas que, habiendo recorrido ese camino antes que yo, compartían generosamente sus experiencias a través de YouTube y artículos en blogs.
Pudimos publicar el libro de mi suegro sin demasiados contratiempos y eso me volvió a despertar el interés tanto en escribir como en publicar . Si era tan fácil, ¿por qué no?
Stephen King dice en su libro Mientras Escribo que tarda unos tres meses en escribir el borrador. ¡Pensé que si él tardaba tres meses yo seguramente lo haría en unos seis!
Tomada la decisión y con el tema en mi mente, me lancé a buscar ayuda en forma de libros. Uno de los primeros fue Mientras Escribo, de uno se mis escritores favoritos: Stephen King.
Él mencionó un plazo de aproximadamente tres meses para el primer borrador y yo, consciente de que él es un escritor consagrado y además uno de los más productivos, pensé… Si Stephen King lo hace en tres meses yo tal vez me demore seis, al fin y al cabo tenía muy claro lo que iba a pasar y mi primera sesión ante el teclado fue de varios miles de palabras. En mis cuentas alegres, creí que mi novela estaría lista, con correcciones y todo, para participar en el premio Amazon Storyteller 2022.
Por supuesto, pasó no solo agosto del 2022 sino también del 2023 y la novela seguía lejos de considerarse terminada, pero afortunadamente, y después de mi entusiasmo inicial, ya no tenía afán en publicarla.
De mis cálculos originales no solo me había equivocado en el tiempo que tardaría y en la extensión final de la obra (calculé 80.000 palabras y estará por el doble), sino también en creer que ya tenía claro todo lo que pasaría. Me auto definí como escritor de brújula pero a la hora de la verdad resulté, como muchos otros, un intermedio entre brújula y mapa, y cuando lo entendí y empecé a hacer un plan, la productividad aumentó considerablemente.
Ahora, en junio de 2024, el primer borrador de El Ladrón de Magia efectivamente está listo y en manos de los lectores beta, el diseño de la portada en sus últimas revisiones y el libro programado para lanzamiento el 2 de agosto, a tiempo de participar en Amazon Storyteller 2024. Quedan un par de semanas para recibir las opiniones de los lectores y un mes y medio para hacer los últimos cambios. Como sea, ha sido un proceso interesante y divertido que me quedó gustando y estoy listo para repetir.
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